Estampado animal: un mundo salvaje de inspiración
A pesar de sus altibajos, es innegable que el estampado animal no deja de ser una tendencia recurrente dentro del mundo de la moda. Ha tenido años buenos y años malos, pero en general, todo depende del uso que se le dé y la calidad del material con que se elaboren las prendas. Como todo, se trata de una cuestión de equilibrio y prestar atención a los detalles
Si bien hay sectores de la moda que lo rechazan abiertamente, otros buscan incorporarlo de diversas maneras, para dar a conocer propuestas llenas de sofisticación y elegancia pero también muy fáciles de llevar.
Hasta hace muy poco, el estampado animal de moda era el de piel de leopardo junto con el de piel de serpiente. Pero desde comienzos de 2019, las modelos Kendall Jenner y Bella Hadid han impuesto otro: el de cebra. Así que, vamos ¡de vuelta al mundo del blanco y negro!
Está claro que los estampados traen lo ‘salvaje’ y, respectivamente, lo sensual a las prendas, sin demasiado esfuerzo. Así que, para estar a la moda, en este 2019, hay que atreverse y darles una oportunidad.
El estampado animal
La reproducción de los patrones del pelaje o la piel de los animales se ha ido haciendo progresivamente cada vez más fácil. Por ello, se pueden encontrar todo tipo de prendas de ropa y objetos con reproducciones -hechas en materiales sintéticos- que parecen casi auténticos. Bufandas, bolsos, vestidos, jarrones, cinturones y más, el animal print está en todas partes.
Hay quienes piensan que se trata de la moda más antigua del mundo, ya que durante la época de las cavernas, el ser humano se abrigaba con la piel de los animales que cazaba, para poder protegerse del frío y así sobrevivir. Posteriormente, el uso de las pieles estaba sujeto a otras condiciones; en las clases más altas, denotaban riqueza.
Tiempo después, el estampado animal volvió para hacerse tendencia en la jungla de concreto. Algunas de las celebridades que no dudaron en lucirlo fueron: Marilyn Monroe, Sophia Loren, Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor, entre otras.
Las fuentes de inspiración
Hay animales que han sido la fuente de inspiración de muchos diseñadores por las características de su piel (o su pelaje, según el caso) pero también, por toda la simbología que gira en torno a ellos.
Es interesante apuntar que, en su mayoría, los animales de la selva y la sabana africana son los que más han triunfado en las pasarelas. Cebras, jirafas, tigres, guepardos, leopardos y serpientes son los preferidos. Sin embargo, hay otros que también han conseguido llegar a la pasarela:
- Osos.
- Vacas.
- Zorros.
- Tortugas.
- Perros (dálmatas).
- Otros felinos salvajes.
Mezclas
En años anteriores, ha sido posible encontrar prendas que combinan dos tipos de estampados, para generar mayor interés e innovar, como los vestidos con rayas de cebra y botones de de leopardo. No obstante, en este momento las mezclas más in son:
- Estampado animal + floral.
- Estampado animal + lentejuelas u otros detalles brillantes.
- Estampado animal (como el de jirafa) en versión blanco y negro.
Blanco y negro, y brillos
Existe una amplia variedad de propuestas para elegir, según nuestro estilo. Bien sea que prefiramos un estampado más discreto (de manchas de tamaño pequeño y colores neutros) o un estampado vibrante, juvenil y audaz (como una bomber con manchas estilo leopardo en lentejuelas y colores fantasía), hay mucho para elegir.
La diseñadora Sara Battaglia ha aprovechado el estampado animal para elaborar propuestas muy elegantes y refinadas a través de las versiones en blanco y negro. Por supuesto, sin importar el estampado que elijamos, hay que mantener siempre un balance y evitar caer en lo vulgar. En este sentido, cabe recordar que todos los excesos son malos.
¿Por dónde empezar con el estampado animal?
Los complementos son perfectos para iniciarse en el mundo del animal print y lograr buenos resultados. Desde bolsos de mano, tote bags, correas para relojes, brazaletes, pañuelos, sandalias hasta las zapatillas más cómodas. Hay mucho de dónde elegir. Eso sí, para triunfar hay que elegir solo uno a la vez, como podemos ver en el siguiente ejemplo.
Para sacar el mayor provecho de esta moda debemos procurar combinarla con colores neutros, variar las texturas, elegir prendas con buenos acabados y, también conjuntarlo con un maquillaje equilibrado y acorde al resto del atuendo. Menos, siempre será más.